¿Cómo ser una mejor versión de uno mismo?
Quiero hablarte de que “la gente no cambia”. Eso es falso, los seres humanos estamos en un constante desarrollo, aprendiendo cosas nuevas todos los días; si es que lo queremos hacer.
Tú tienes el poder de cambiar tu vida y tomar acciones que te lleven a ello. Ser la mejor versión de ti mismo comienza por conocerte mejor, por saber con exactitud cuáles tus fortalezas, tus “áreas de oportunidad”, esos espacios que puedes mejorar y estar consciente que son parte de tus debilidades.
Asimismo, alimentar con acciones y tareas donde se puedan cuantificar tus fortalezas, ayudará a aumentar tu autoestima y poco a poco se iniciará un cambio en una espiral ascendente, donde realmente te conviertes en una mejor versión de ti mismo.
Hoy te comparto algunos consejos para que lo logres:
1. Haz de tu vida una pieza única.
No existe un solo ser humano igual a ti. Date el tiempo de revisar tus prioridades, define cómo será tu día, tu mes, tu año. Lleva tu vida a través de metas a corto, mediano y largo plazo; detente por momentos y observa este universo perfecto en el que vivimos, donde nada falta y nada sobra. Vivimos a un ritmo tan acelerado que, en muchas ocasiones, no nos detenemos a observar todo lo que la vida nos regala con instante. Tú naciste con un propósito y parte de vivir, es descubrirlo.
2. Agradece.
Todas las mañanas ponte como prioridad hacer un proceso de gratitud, sólo toma unos minutos. Cierra los ojos, o si sabes, haz una meditación y piensa todo lo que tienes por agradecer.
Posteriormente, piensa en todo lo que deseas obtener en la vida, en todos los sueños que todavía no realizas. Y agradece tenerlo, como si ya lo tuvieras. El agradecimiento viene normalmente después de recibir. Agradece hoy, antes, y en ese momento, este campo cuántico en el que vivimos y que nos rodea, se verá forzado a dártelo, pues ya lo agradeciste.
3. Abraza tus problemas.
Primero elimina esa palabra, tú no tienes problemas, sólo situaciones. Abraza esos retos, obsérvalos de cerca, no los resistas, aquí existe un plan perfecto para ti también y para quienes te rodean.
Todo tiene un objetivo y propósito. Los buenos momentos no son los que nos hacen crecer, sino los retos y las dificultades. Nunca importará lo que te pase, pero lo qué harás como respuesta, marcará tu vida para siempre.
Recuerda, los pájaros no cantan porque son felices, son felices porque cantan.
4. Ojo con tus pensamientos reinantes.
Tu mente es como una silla. Sólo puede estar sentado un pensamiento a la vez. ¿Qué pensamientos sientas de manera regular en esa silla?
Nuestras emociones son respuestas a nuestros pensamientos. Debemos tomar conciencia de esos pensamientos y su connotación.
Las emociones, por importantes que parezcan, son sólo el reflejo de esos pensamientos. Piensa en algo triste, piensa en algo a lo que temas, piensa en alguien a quien quieres, piensa en el momento más feliz de tu vida, y toma conciencia de los miles de químicos que segrega tu cuerpo; dependiendo del pensamiento que escogiste.
Si no te gusta como “te sientes”, escoge otro tipo de pensamientos.
5. Lee, desarrolla el hábito de la lectura.
Recuerdo el día que terminé de leer “El Alquimista” de Paulo Coelho, uno de mis libros favoritos. Ese día me faltaba el epílogo para terminarlo; estaba en un restaurante esperando mi siguiente vuelo y pensé “¡NO, IMPOSIBLE! Me lo va a echar a perder. ¡No puede en 5 hojas resolver todo lo que queda pendiente! “. Sentí coraje, había amado cada palabra y giro de la historia.
No conocía a Coelho en aquel entonces. Y así, en la última línea, resolvió en contadas palabras el final del cuento más hermoso que he leído. Comencé a llorar, me sentí profundamente emocionada, agradecida por la maestría del autor, inspirada y enamorada.
El mesero se acercó y me dijo “nunca pensé que un libro pudiera provocar tantas emociones. ¿Me puedes decir qué libro es?”
Nada te va a llevar más lejos que un libro. Es imposible sustituir el diálogo interno que te genera la lectura. Ahí creces, te transformas.
6. ¡Actúa! Actúa más.
La acción cura el miedo. Y el miedo es la emoción que frena de golpe la acción. Está comprobado que más del 80% de las cosas que le preocupan a la gente, nunca suceden.
7. Cambia.
“Cuando cambias la forma de ver las cosas, las cosas que miras, cambian.”
Observa y acepta que vivimos en un universo perfecto y equilibrado. Lleno de ciclos que se cumplen sí o sí. Tú eres parte de ese universo y tú decides también si en el camino vas con las cortinas corridas o disfrutando el paisaje. Me dirás probablemente “tú no sabes lo que me ha pasado” y yo te responderé: las cosas no pasan ni te tocan, todo fue diseñado para ti, desde el amor, buscando tu crecimiento y tu evolución.
Espero que realmente te haya gustado esto que te compartí. Si te gustó, compártelo en las redes sociales.
¿Qué añadirías a la lista para convertirte en la mejor versión de ti mismo?
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